
Aunque el debutante de IndyCar Robert Shwartzman no logró completar las legendarias 500 Millas de Indianápolis el domingo 25 de mayo, sí se llevó consigo un pedazo eterno de la historia de este mítico evento: la codiciada pole position.
Un verdadero cuento de hadas se hizo realidad para Shwartzman y el equipo PREMA Racing. En su primera carrera en óvalo y como parte de una escudería debutante en la NTT INDYCAR SERIES, el joven ruso desató la magia al conquistar la NTT P1 Award para la edición 109 del Indianápolis 500, presentada por Gainbridge.
Desafiando lo imposible, Shwartzman voló en la pista con un promedio de 232.790 mph en sus cuatro vueltas durante el Firestone Fast Six, al mando del Chevrolet No. 83 de PREMA Racing. Así, no solo marcó su nombre con fuego en el Brickyard, sino que también convirtió a PREMA en el primer equipo en lograr la pole position en su debut desde que Mayer Motor Racing lo hiciera con Tom Sneva en 1984.