
¿Cómo sería para ti la ciudad ideal? ¿Qué elementos deberían ser indispensables para que una ciudad sea perfecta? Cuando vemos a nuestro alrededor podemos notar que nuestras ciudades están lejos de esa perfección, la corrupción, las desigualdades, los abusos, la falta de oportunidades, alimento y sobre todo protección no están garantizados para todos.
Es por esta razón que nuestros corazones siempre están anhelando un mejor lugar para vivir porque aún no lo tenemos. En el salmo 48 nuestros ojos son dirigidos a la ciudad de Dios, pero no es una ciudad de acuerdo a estándares humanos, porque no es grandiosa por un excelente sistema económico o sustentabilidad, es una ciudad segura porque Dios está en ella.
El salmista nos invita a que admiremos, vayamos y seamos parte de esta ciudad desde ya, gozando de la presencia de Dios en medio de nosotros quién nos garantiza un refugio seguro.