
Coral Gutiérrez, una informática de profesión y una apasionada maestra en un tranquilo pueblo de Jaén, Andalucía, España, se presenta como una mujer de múltiples facetas. Coral encuentra en la escritura un refugio ante las demandas cotidianas y las rutinas diarias. Este acto creativo se convierte en su pequeño lujo, un espacio donde no hay restricciones de género ni limitaciones creativas. Desde poesía hasta cuentos de fantasía, relatos de terror o momentos de humor, Coral se sumerge en la diversidad literaria con la misma intensidad con la que abraza su labor educativa.