
Martin y Rocka festejan noche de brujas con una de las joyitas más olvidadas de las buenas décadas de carrera de Tim Burton. Un slasher gótico que dobla como un whudonnit de época embellecido por una fotografía y banda sonora que nos hacen perder la cabeza. En el camino incluso comentamos un poco del "fenómeno" Mercado Play y terminamos invitandolos a una sorpresa propia.