
Hay momentos en los que, sin darnos cuenta, volvemos una y otra vez al mismo lugar de dolor: esa herida de la infancia que nos hace dudar, que nos paraliza, que nos hace sentir que no somos suficientes.
Pero hoy, este episodio es una invitación a salir de ese ciclo. A dejar de mirar atrás con miedo, y comenzar a caminar hacia adelante con confianza.
Reconectar con tu niña interior no es para quedarte atrapada en el dolor, sino para abrazarla, honrarla… y avanzar.
Confía en lo que te dicta el corazón. Tienes todo para salir adelante