•La herida de humillación se despierta entre entre el primero y tercer año es generada con cualquiera de los padres, quién le reprimía cualquier tipo de placer físico. Son niños que se han sentido cohibidos de su libertad de expresión o de conocer el placer físico.
Actitudes y comportamientos asociados:
- Personas que les cuesta disfrutar a partir de los 5 sentidos.
- Sienten culpa por los deseos sexuales.
- Hacen todo lo posible para no sentirse libres por miedo a desbordarse perder el control y sentir vergüenza.
- Personas serviciales que se olvidan de sí mismos y buscan suplir las necesidades de otros.
- A menudo se critica a si mismo de manera despectiva, siente desagrado y en el mayor de los casos asco por sí mismo.
- Se recompensa a menudo con comida, por lo que después siente culpa.
- Atrae situaciones en público para hacerse humillar.
- Les cuesta construir relaciones de pareja en las que se sienta suficiente.
Esta herida se sana soltando la pesada carga que el humillado lleva en la espalda. Se consigue mediante el perdón hacia las personas que lo dañaron, haciendo las paces con el pasado para poder comenzar a valorarse como la persona que realmente es, aquella de la que solo él es responsable como adulto.