
¿Por qué no nos dijimos nada?
¿Por qué complicamos todo?
¿Por qué huimos de nada?
Nos da tanto miedo lo que no entendemos, y en vez de afrontarle nos vamos y arriesgamos nada.
Está carta está hecha desde el coraje, y la frustración,
Dicen que nunca digas tarde, pero ya es mañana,
el ayer se lo comió, al menos en el amor.
Aún recuerdo esa pelea,
Nadie gano nada, solo perdimos al otro.
Desgastamos palabras, y con lo sobrante pensamos que sería lo bastante fuerte para sostener nuestro falso amor.
¿Por qué no nos dijimos nada?
Dolió creer en ti, amor.
Te apuesto que te canso entenderme, que te dio flojera, a su vez, comprenderme.
No estábamos hechos para comernos el mundo, eso se vio.
Pareciera que no jugamos al juego del amor de dos.
Quiero que entiendas una cosa, todo viene desde el corazón,
Si quisimos engañarnos no fue por falta de razón, es que en el fondo necesitábamos hacerlo, tal vez nos faltaba amor.
Si los planetas se alinearan, y me concedieran un deseo, sería reencarnar en otro ser, que me guarden este cuerpo, porque a este le falta más por vivir,
solo quiero ver, si en aquel te volveré a encontrar, y tal vez ahí, sí nos demostremos amor verdadero.
El cuarto no tiene temperatura, cómo ese día. Todo esta en silencio, el piano hace su trabajo.
No me cuesta escribir esto porque…todo viene desde el corazón.
¿Por qué no nos dijimos nada?
Hacerlo, tal vez ya no ayude mucho, estás feliz con otro, yo feliz con otra. Así es el amor, te ahoga un poco, y te saca cuando se da cuenta que aún no estas listo para ponerte de pie en el charco en el que siempre ha estado.
Metáforas, metáforas, metáfora…Mi vida está lleno de esto,
Silencio, silencio, silencio…Tu vida está lleno de esto.
Si no lo queríamos…
Nos hubiéramos dicho algo.