
A veces no necesitamos motivación, solo una frase que nos devuelva al presente.
En este episodio exploramos cómo las afirmaciones pequeñas, esas que no prometen nada, pero lo sostienen todo pueden transformar la manera en que tu cerebro responde al miedo, la ansiedad y la acción.
Descubrirás por qué el cuerpo le cree más a lo concreto que a lo grandioso, y cómo una palabra dicha con calma puede reorganizar tu atención, bajar la tensión del cuerpo y entrenarte para habitar la vida con más presencia.
Porque lo que ensayamos en silencio… nos reacomoda por dentro.