
En este segundo día de ejercicios espirituales con café en mano y alma abierta, nos adentramos en el Cantar de los Cantares, donde una mujer se levanta en la noche y sale a buscar al amor de su alma.
Este episodio es una invitación a reconocer ese deseo profundo que arde dentro y que muchas veces hemos adormecido.
Dios no se queda esperando en un templo vacío…
te busca, te llama, te nombra.
Y cuando lo encuentras, te abraza para que no lo sueltes jamás.
Un episodio para quienes buscan a Dios desde la vulnerabilidad, el amor y el anhelo.
Escúchalo caminando, con el corazón despierto.