Como cristianos siempre vamos a oponernos a cualquier ofensa contra la imagen de Dios. Y aunque nos oponemos a cualquier forma de homicidio o suicidio, eso no hace que admitamos lo que en realidad son, una tragedia.Esta vez queremos hablar sobre distintos procedimientos médicos para acabar con la vida de un ser humano que están siendo cada vez más aceptados por la sociedad ¿Es Dios capaz de perdonar a las personas que deciden practicarlo? ¿Deberíamos permitir que esto suceda? ¿Cómo podemos llevar esperanza a las personas que lo están considerando?