
Uno de los aportes más significativos en nuestro desarrollo es sin duda los momentos de nuestra niñez que ofrecen experiencias y gusto para quizá el futuro. Es así como de la vista nace el amor, la curiosidad y la intriga por ver cómo es que funciona el mundo mismo.
Así es como la Doctora Ana Castillo nos relata las vivencias más significativas que la alentaron en su camino en la ciencia y el maravilloso mundo de la Biología.