Dormir en medio de la tormenta no significa ignorar el caos, sino confiar plenamente en que Dios sigue al mando. En los momentos donde todo parece incierto, Él nos invita a descansar en Su fidelidad. El silencio no es ausencia de respuesta, sino el espacio donde nuestra fe se fortalece. Cuando no escuchamos nada, aprendemos a creer que Él sigue obrando. En el reposo, Dios nos enseña que Su paz no depende de las circunstancias. Dormir en la tormenta es el acto más profundo de confianza en Su amor y soberanía.
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Dormir en medio de la tormenta no significa ignorar el caos, sino confiar plenamente en que Dios sigue al mando. En los momentos donde todo parece incierto, Él nos invita a descansar en Su fidelidad. El silencio no es ausencia de respuesta, sino el espacio donde nuestra fe se fortalece. Cuando no escuchamos nada, aprendemos a creer que Él sigue obrando. En el reposo, Dios nos enseña que Su paz no depende de las circunstancias. Dormir en la tormenta es el acto más profundo de confianza en Su amor y soberanía.
Jesús habló de dos puertas: una ancha, fácil y popular, y otra estrecha, pequeña y poco transitada. La ancha promete libertad, pero deja el alma vacía; la estrecha parece difícil, pero lleva a una vida llena de propósito. Escoger la puerta estrecha es elegir a Jesús, confiar cuando no todo tiene sentido y caminar con fe, no con prisa. No se trata de reglas, sino de relación. De aprender a amar, servir y descansar en Su gracia. Porque lo que el mundo llama pérdida, Dios lo transforma en vida. La puerta estrecha no es un límite, es la entrada a la verdadera libertad.
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Dormir en medio de la tormenta no significa ignorar el caos, sino confiar plenamente en que Dios sigue al mando. En los momentos donde todo parece incierto, Él nos invita a descansar en Su fidelidad. El silencio no es ausencia de respuesta, sino el espacio donde nuestra fe se fortalece. Cuando no escuchamos nada, aprendemos a creer que Él sigue obrando. En el reposo, Dios nos enseña que Su paz no depende de las circunstancias. Dormir en la tormenta es el acto más profundo de confianza en Su amor y soberanía.