
Falta menos de un año para la Copa Mundial de Futbol. Estos eventos deportivos son una oportunidad para las redes internacionales de trata de personas con fines de explotación sexual, laboral y mendicidad forzada. Es necesario redoblar esfuerzos y diseñar políticas públicas contra la trata de personas en eventos deportivos, estamos a tiempo de que el mundial sea un espacio de celebración y no de explotación.