
Puedes tener grandes o simples sueños en tu vida, pero sin determinación nunca avanzarás hacia ellos para que sean una realidad. Josué 1:9 nos ofrece más que una frase alentadora o motivacional; es una Palabra de Dios que nos exhorta a actuar con decisión y sin ambigüedades, desechando la duda, el temor, los prejuicios, el desánimo, la incredulidad, y por sobre todo la falta de fe. Ser determinantes como cristianos no significa tener el control de las cosas, al contrario, es ceder el control de las circunstancias a Dios; sólo de esta manera podremos experimentar realmente la vida de paz, justicia y gozo que Dios desea para cada uno de nosotros.