
Dicen que en el corazón de Madrid hay un fuego que nunca se ha apagado.
Un horno antiguo, alimentado por leña de encina…y por tres siglos de historias.
Allí, bajo las calles de la ciudad, hay una cueva donde el tiempo se detiene.
Donde viajeros, artistas y desconocidos compartieron mesa…
y destino.
¿Es un restaurante?
¿O es algo más?
En este episodio de Bocados con Historia, te llevo al lugar donde la memoria se sirve
caliente y crujiente.
El restaurante más antiguo del mundo.
Botín.
¿Tienes hambre…?
Pues vamos allá.