
La tercera ley biológica describe detalladamente la correlación entre el cerebro, la psique y el órgano. Este último a su vez, en correspondencia con la capa germinal y embrionaria a la que pertenece. Esta ley abre la posibilidad para desarrollar una nueva ontología sobre nosotros mismos, puesto que confirma científicamente que nuestra animalidad en tanto mamíferos, aún sigue sosteniendo lo que imaginaria y simbólicamente constitiuye nuestra identidad y su relación con nuestra cultura y entorno.
Para este episodio 06 necesitas:
Cierra tus ojos,
respira profundamente...
...y bioencuéntrate.