
Virgo que nos empuja a cerrar ciclos y soltar patrones; Plutón fuera de límites intensificando procesos de poder, transformación y obsesión; Saturno retrógrado en Piscis revisando nuestros límites, responsabilidades y la relación con lo intangible; mientras el Sol y Mercurio en Virgo rozan el nodo sur, obligándonos a ordenar el pasado para no repetirlo.🌑♍
Es una quincena de limpieza profunda, donde la exigencia virgoana se encuentra con la necesidad de soltar y depurar. Un tiempo de revelaciones que incomodan, pero que nos muestran el camino hacia un orden más auténtico.🌱.