
Como muchos, yo crecí bajo los valores de que la familia lo es todo, no importa si te hacen daño, la familia siempre va primero.
Pero mi experiencia, no solo como psicológa, sino como ser humano, me ha hecho entender que quien te hace daño no te ama, y quien te hace daño no merece estar en tu vida.
En este episodio te invito a reflexionar acerca de lo tóxica que puede llegar a ser la familia y cómo por estas épocas de fin de año se nos obliga a hacernos de la vista gorda frente a personas que en el pasado nos han lastimado.
Prioriza tu salud mental y bienestar y corta esos lazos que no te hacen bien, el vínculo de sangre no siempre es el más fuerte.