Este ensayo presenta una reflexión sobre las movilizaciones reivindicativas de la última década, cuyas expresiones son una síntesis de la construcción de una cultura feminista, las demandas ante la violencia feminicida y la desigualdad que viven las jóvenes, así como los recursos con los que cuentan para reivindicar el espacio social. El análisis propuesto se desarrolla a partir de los conceptos de genealogía y cronotopía feminista, con el objetivo de destacar la sucesión y acumulación de experiencias vividas y legadas a través de la acción e incidencia feministas. La genealogía feminista conforma un legado histórico en el que mujeres de sucesivas generaciones podemos aprovechar los recursos sociales, políticos y simbólicos para andar las brechas abiertas por antecesoras feministas. Por ello la experiencia y cultura feminista puede encontrarse en los espacios académicos, mediáticos, políticos y artísticos, por mencionar algunos, en los que han incidido las mujeres durante los últimos dos siglos. Mientras que la cronotopía feminista refiere a las transformaciones que tienen los espacios sociales a través de a vivencia y apropiación vindicativa que de ellos hacen los colectivos.

Datos de la autora. Raquel Güereca Torres. Doctora en Ciencias Políticas y Sociales por la Universidad Nacional Autónoma de México.

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