
Siempre me gusta pensar que esta vida es una danza de opuestos en donde nos movemos entre el miedo y el coraje, el placer y el dolor, el día y la noche, pero si hay pasión por algo que nos lleve al límite, que nos permita sentir, cada paso de la coreografía de esta danza llamada vida que nos lleve a conectar con nuestro propósito, bien vale la pena.
En este episodio, tuve una conversación con mi admirado Rojstar, Gerardo Nuño, quien me hace reír a diario, a mí y a cientos de miles de personas. El cómo llegó a eso me parece una historia digna de contar, porque me inspira a mi como estoy segura que lo hará contigo.
Búscalo en IG como @rojstar y síguelo para que te llenes de risas y alegría.