
Soledad Deza es la abogada que llevó adelante la defensa de Belén, la joven tucumana encarcelada en 2014 acusada de homicidio después de sufrir un aborto espontáneo en el hospital de San Miguel.
Belén, es el nombre ficticio para respetar su identidad y anonimato, fue a la guardia por un dolor abdominal, sin saber que estaba embarazada. Se entera ahí y la acusan de matar a un feto. Un feto que aparece en otro lado del hospital, en la otra ala.
Casi tres años estuvo presa Belen, hasta que Soledad Deza se puso su caso al hombro junto con organizaciones de mujeres como Mumala y la saco de esa prisión ilegal.