
El que te ofende es más débil o más fuerte que tú. Si es más débil: perdónalo: y, si es más fuerte, perdónate. Para que el hombre no se sienta ofendido ni agredido, ha de permanecer imperturbable e imparcial hacia todo ataque que pueda sobrevenirse, en este capítulo te ayudaremos a afrontar de la mejor manera a las críticas.