Literatura con los ojos cerrados.
(http://avozencuento.wordpress.com/)
El relato no está en las páginas impresas, en una pantalla o en las imágenes. El relato está en las palabras, que encuentran múltiples canales por los que viajar desde su autor hasta sus lectores. En nuestro caso, las palabras se convierten en sonidos. Así que prepara tu bebida favorita, siéntate en ese rincón que tanto te gusta, quizá cerca de la ventana, quizá en la penumbra, y cierra los ojos. Escucha. Tan sólo escucha. Las historias comienzan.
All content for A voz en cuento is the property of Jose Jesus Garcia Rueda and is served directly from their servers
with no modification, redirects, or rehosting. The podcast is not affiliated with or endorsed by Podjoint in any way.
Literatura con los ojos cerrados.
(http://avozencuento.wordpress.com/)
El relato no está en las páginas impresas, en una pantalla o en las imágenes. El relato está en las palabras, que encuentran múltiples canales por los que viajar desde su autor hasta sus lectores. En nuestro caso, las palabras se convierten en sonidos. Así que prepara tu bebida favorita, siéntate en ese rincón que tanto te gusta, quizá cerca de la ventana, quizá en la penumbra, y cierra los ojos. Escucha. Tan sólo escucha. Las historias comienzan.
Que hérmoso relato este "Puertas" de Heberto Gamero Contín, incluido en su libro "Tras la puerta de abril" (https://libreteria.com/producto/tras-la-puerta-de-abril-relatos-para-despues-de-la-crisis-heberto-gamero/). Qué suavidad en sus símbolos, y qué terrible en todo momento. Y es que, en literatura, las puertas dan mucho de sí... https://avozencuento.wordpress.com/ Música: Schubert- Wanderer-Fantasie-C-Dur D.760 - 2. Adagio.
A voz en cuento
Literatura con los ojos cerrados.
(http://avozencuento.wordpress.com/)
El relato no está en las páginas impresas, en una pantalla o en las imágenes. El relato está en las palabras, que encuentran múltiples canales por los que viajar desde su autor hasta sus lectores. En nuestro caso, las palabras se convierten en sonidos. Así que prepara tu bebida favorita, siéntate en ese rincón que tanto te gusta, quizá cerca de la ventana, quizá en la penumbra, y cierra los ojos. Escucha. Tan sólo escucha. Las historias comienzan.
